Museos Vaticanos

Esta acuarela, alejada de la producción típica de Diego Rivera, cuya fama va inseparablemente ligada a la extraordinaria actividad de muralista, es un ejemplo interesante de un filón secundario: la producción de acuarelas, aguadas y dibujos. En particular el guerrero danzante pertenece a la serie llamada Carnaval de Huejotzingo: folios dedicados a los personajes de uno de los carnavales mexicanos más célebres, nacido en recuerdo de las fiestas del año agrícola del Dios de la lluvia y la fertilidad Tlaloc. Durante los festejos las personas salían a la calle con los rostros cubiertos con máscaras lignarias, presumiblemente semejantes a la que lleva este guerrero vivamente variopinto. La obra pertenece probablemente a la fase creativa de cuatro grandes pinturas, que representan las fiestas de México, destinadas al Hotel Reforma, tres de los cuales se conservan hoy en el Palacio de Bellas Artes de Ciudad de México.