Museos Vaticanos

Stilleben mit Herrgottswinkel (Naturaleza muerta con rincón de Nuestro Señor) está fechado entre 1909 y 1910, cuando Gabriele Münter, después de años de viajes y de estudios, se traslada a Murnau junto con su compañero Kandinsky. Se remonta a ese período su interés por el arte y la artesanía de tradición popular, una auténtica pasión que la impulsa a coleccionar obras de tema sagrado como esculturas lignarias, objetos de cerámica y pinturas sobre vidrio. El cuadro retrata un lugar apartado de la casa de Murnau con objetos queridos, que aparecen también en otras composiciones, entre los cuales un crucifijo lignario y una Virgen, copia de la “Virgen negra” de Niedermünster; mientras que a los lados del Crucifijo se ven dos pinturas sobre vidrio, también éstas de producción popular, casi como si compusieran una especie de rincón votivo casero, reservado a las imágenes sagradas.