La vía del mar
La vía del mar

La vía del mar

1 de diciembre de 2010
Rampa helicoidal, Museos Vaticanos

A partir del 1 de diciembre, sesenta ejemplares de embarcaciones procedentes de todo el mundo abandonan el Museo Etnológico para ser mostradas a lo largo de la rampa helicoidal, una nueva área expositiva. Los visitantes que quieran acceder a los Museos Vaticanos a pie, sin utilizar las escaleras mecánicas, podrán admirar, durante el recorrido, una selección de barcos en miniatura de todos los continentes, junto a fotografías en blanco y negro, realizadas por los misioneros a comienzos del siglo XX.

La intención del proyecto expositivo - declara el prof. Antonio Paolucci, Director de los Museos Vaticanos - es "Representar las civilizaciones del hombre, atestiguar la histórica atención, la curiosidad y el respecto del mundo católico hacia las culturas extraeuropeas, vincular emblemáticamente el destino de la Iglesia de Roma, "nave de San Pedro", en el viaje hacia la salvación de todos y cada uno".

El "viaje" empieza con la piragua Ivukapi, excepcional embarcación de las Islas Salomón, siguen dos barcos de vela: respectivamente, un refinado navío inglés, que navegaba entre Inglaterra y Oceanía y, a su lado, un velero japonés, ambos testimonio del encuentro entre Occidente y Oriente en un mundo sin fronteras. La ruta continúa con una amplia gama de modelos asiáticos en miniatura que explican bien las diferentes tipologías y empleos para las que se utilizaban estas embarcaciones. Destacan sobre todo un valioso barco chino de marfil en el que se realizaban fiestas y una canoa, larga y sutil, perteneciente a los reyes de Tailandia. Oceanía está representada, además de por sus piraguas y velas con forma de colas de golondrinas, también por una espectacular canoa con proa en forma de animal procedente de las Islas Salomón, semejante a la gran piragua Ivukapi.
A lo largo del recorrido, los visitantes encontrarán canoas de corteza y piraguas representativas de pueblos y culturas propias del extenso continente de las Américas. La balsa de los Mosetenes con dos timones evidencia, por ejemplo, la gran habilidad de las poblaciones para navegar por aguas agitadas y zonas escarpadas, mientras que las embarcaciones de los Alakuf revelan el coraje de un pueblo que supo convivir con el clima adverso de la Tierra del Fuego. Al final de la ruta, sobrepasados los barcos africanos, el visitante podrá admirar la maravillosa vista de la cúpula de San Pedro y empezar un nuevo viaje al descubrimiento de los Museos del Papa.
La exposición ha sido realizada por el Arq. Piero Castri, basándose en una idea del padre Nicola Mapelli, conservador del Departamento Etnológico de los Museos.