Primeros auxilios: una ayuda rápida para las emergencias
Entre las tareas —no sólo institucionales— de los Museos Vaticanos se cuenta la gestión rápida y tempestiva de las situaciones de emergencia sanitaria que no requieran de inmediato alguna prueba con instrumental médico, la visita de un especialista o la hospitalización.
Para una experiencia de visita serena y bajo protección, 18 desfibriladores, instalados a lo largo de todo el recorrido museístico, garantizan un tratamiento cardioprotector de primeros auxilios de parte de todos los miembros del Cuerpo de Guardia.
Para los casos de mayor gravedad está activo un servicio de ambulancia a fin de trasladar a la persona al hospital más cercano.
Desde abril de 2017, gracias a una convención firmada con la Dirección de Sanidad e Higiene del Governatorato del Estado de la Ciudad del Vaticano, los voluntarios de la Confederación Nacional de las Misericordias colaborarán con el personal sanitario vaticano a la hora de prestar asistencia y socorro a los visitantes afectados por algún malestar físico o un accidente. El servicio de médicos y enfermeros será fijo y estará garantizado todos los días durante el horario de apertura de los Museos.
En los Museos no está prevista la expedición de recetas o certificados médicos.