Kýlix ática atribuida a Douris: Jasón
Kýlix ática atribuida a Douris: Jasón
Jasón, el héroe tesalio hijo de Esón rey de Yolco, llega a Cólquide (región de Asia Menor entre el Cáucaso y Armenia) a la cabeza de una expedición de nobles compañeros para llevar de nuevo a su patria el Vellocino de oro del carnero divino y así recuperar la posesión del trono que Pelia le había usurpado. Sin embargo, el rey Eetes había consagrado el Vellocino de oro a Ares, y había puesto una enorme serpiente para custodiarlo. Jasón es arrojado al suelo por el monstruo y Atenea acude a salvarlo: la diosa inclina su mirada hacia la cabeza de la enorme serpiente, que todavía tiene al héroe entre sus fauces, mientras que detrás aparece el Vellocino colgado en la rama de una encina. La kýlix se atribuye a Douris, uno de los ceramógrafos áticos de estilo severo que dominan el panorama de las primeras tres décadas del siglo V a.C. De este gran maestro del dibujo, en este caso, se aprecia la habilidad creativa y la imaginación a la hora de pintar los rasgos del monstruo.