Museos Vaticanos

El próximo 16 de mayo de 2025 se presentará la nueva instalación de la colección de Mosaicos Menudos de los Museos Vaticanos, en el interior de las Galerías de la Biblioteca, concretamente en la histórica Sala Paulina II.
Se trata de un recorrido expositivo renovado, de carácter permanente, que invita a redescubrir una de las expresiones más fascinantes de las artes decorativas del siglo XVIII: el micromosaico.
El corazón de la instalación lo constituye la disposición de las obras en los armarios originales del siglo XVIII de la Galería, mobiliario concebido originalmente para custodiar el saber y que hoy se transforman en relicarios destinados a acoger el arte del detalle.
Una elección expositiva cargada de significado, que reconcilia el micromosaico con su universo de referencia: el de la maravilla íntima, de la contemplación silenciosa, del objeto precioso que invita a ser descubierto de cerca.

El origen de esta forma expresiva está íntimamente ligado a la Basílica de San Pedro, donde, a finales del siglo XVI, nació el Estudio del Mosaico Vaticano con el objetivo de sustituir las pinturas por obras musivas de mayor durabilidad.
De esta tradición nace el micromosaico: una técnica minuciosa, aplicada inicialmente a objetos de lujo, que con el tiempo se convirtió en emblema del gusto cosmopolita propio del Grand Tour.

La colección de los Museos Vaticanos —una de las más importantes del mundo— da testimonio de la delicadeza de un arte que transforma pequeñas teselas de esmalte de apenas unos milímetros en visiones de una delicadeza y una fuerza sorprendentes.
La nueva instalación, comisariada por el Departamento de Artes Decorativas, será presentada el 16 de mayo en presencia de Sor Raffaella Petrini, F.S.E., Presidenta de la Gobernación del Estado de la Ciudad del Vaticano; de la Directora de los Museos Vaticanos, Barbara Jatta; del historiador del arte Alvar González-Palacios, y de Luca Pesante, responsable del departamento.

La apertura al público está prevista a partir del sábado 17 de mayo de 2025.
Esta intervención se enmarca dentro del proyecto más amplio de valorización de las colecciones de artes aplicadas de los Museos Vaticanos.
Una invitación a detenerse, a acercarse, a observar. Porque solo así —de cerca— lo infinitamente pequeño revela toda su grandeza.