Museos Vaticanos

Ceremonia de inauguración, el jueves 4 de noviembre en los Museos Vaticanos, del "laboratorio transparente" que albergará la restauración de los modelos en tierra cruda que Bernini diseñó para las figuras broncíneas de los Ángeles y los Santos del Altar de la Cátedra y del Santísimo Sacramento en San Pedro. Las obras, conservadas en la Pinacoteca Vaticana —en depósito de la Basílica de San Pedro— necesitan una restauración minuciosa, larga y meticulosa, que llevarán a cabo los especialistas del Laboratorio de Restauración Metales y Cerámicas de los Museos Vaticanos bajo la guía de su Director, el prof. Antonio Paolucci. La supervisión de la intervención conservativa, en cambio, corre a cargo del prof. Arnold Nesselrath, Delegado Científico de los Museos Vaticanos.
A causa de las dimensiones inusuales de los modelos, ha sido necesario proyectar un espacio adecuado para albergarlos en condiciones de holgura y seguridad. Así se ha edificado, en la zona de los Museos conocida como "Patio de la Zitella", una estructura elegante, ligera, transparente, precisamente un "laboratorio abierto", que gracias a sus enormes vidrieras y a un recorrido perimetral externo dotado de paneles didácticos, permitirá a los visitantes observar de cerca la restauración en acto de la obra.

El "laboratorio transparente" ha sido financiado por el New York Chapter de los Patrons of the Arts in the Vatican Museums, mientras que de la ideación y el estudio se ha ocupado la Superintendencia de los Museos Vaticanos en colaboración con la "histórica" empresa Castelli, que ha hecho posible su factibilidad y realización.
La estructura, de planificación puramente racional, se ha compuesto con cuadrados modulares de hierro y vidrio, que en el futuro pueden dar flexibilidad al espacio y se pueden transformar según las necesidades de los Museos. La base en cemento, simplemente apoyada en el suelo existente, ha sido concebida junto con la estructura superior con la rotación de dos cuadrados que forman una estrella. La cobertura de hierro, sustentada con diez montantes, está separada de la estructura acristalada para crear una distancia que valorice la célula interna, donde se conserva y se restaura la obra de arte.

El  ambiente está estudiado con requisitos técnicos de iluminación y de climatización que garanticen la conservación de los Ángeles, con una aportación de luz natural gracias a la exposición de la instalación planimétrica que gira según las estaciones y, si es necesario, se controla con cortinas.