Museos Vaticanos

En la tapa está representada la difunta semirreclinada en una cama (klíne) como si participara en un banquete, cómodamente recostada en dos almohadas, vestida con una larga túnica, adornada con sus joyas y confortada por un flabelo. La cabeza cubierta con una capa, sin embargo, recuerda que no se trata del mundo de los hombres sino de ultratumba, así como la granada que tiene en la mano izquierda, un fruto que lleva como atributo la reina de ultratumba Perséfone.
En la escena de ceremonia fúnebre, en la caja aparece de nuevo la difunta en una kline drapeada, referencia al lecho fúnebre, mientras que detrás se asoma un servidor con un cofre que alude a los preparativos para el último viaje. A la derecha un hombre y una mujer asisten a la escena, mientras que el hombre que está a la izquierda es una referencia simbólica a una serie iconográfica distinta, siempre de tema funerario, a saber la aparición del marido premuerto, para simbolizar el reencuentro y la unión de los cónyuges ultratumba.
Gracias a la restauración, se han identificado restos de la viva policromía original, que enriquecía la piedra esculpida, semejante a la que podemos observar en las pequeñas urnas de terracota [cfr. Urna cineraria de la Tumba de los Ceicna; Urna cineraria de Thana Heluśnei].