Accesibilidad
Los Museos Vaticanos, un museo para todos y de todos. Un lugar cautivador, de participación y de inclusión. Un museo para disfrutar, ver, tocar, escuchar y oler.
Los Museos Vaticanos reservan la entrada gratuita a todos los visitantes discapacitados que presenten un certificado que testifique una invalidez superior al 74%. En caso de que la persona discapacitada no sea autosuficiente, la entrada también será gratuita para el acompañante.
Esta tipología de visita no se puede reservar online: las entradas, gratuitas, se emiten, previa presentación del certificado de invalidez, en las ventanillas Permisos Especiales y/o Recepción en el vestíbulo de los Museos.
La persona discapacitada y su acompañante tienen garantizada una entrada prioritaria skip the line (sin hacer cola).
Los Museos Vaticanos ponen a disposición de los visitantes con problemas de deambulación un servicio (hasta agotar existencias) de alquiler gratuito de sillas de ruedas, situado en el guardarropa.
Para el alquiler se requiere presentar y dejar en depósito un documento de identidad válido.
Los Museos son accesibles a visitantes con scooters eléctricos y sillas de ruedas eléctricas. Sin embargo, debido a su tamaño, el acceso en algunas zonas de los Museos no está permitido.
En tal caso se invitará al visitante a desplazarse con sillas de ruedas tradicionales, que podrá alquilar gratuitamente en el vestíbulo de la entrada.
A lo largo del recorrido de visita y cerca de las zonas de refrigerio hay aseos adaptados para personas discapacitadas. Se aconseja consultar el Mapa de los Museos Vaticanos para encontrar con mayor rapidez los servicios higiénicos.
Gran parte de las áreas museísticas de los Museos Vaticanos son accesibles a personas con discapacidad motriz.
Para facilitar la visita, sin embargo, los Museos Vaticanos aconsejan un itinerario de visita sin barreras que, gracias a la asistencia del personal del Cuerpo de Guardia, permite acceder fácilmente a los principales servicios y puntos de interés.
Las visitas guiadas propuestas y organizadas por los Museos Vaticanos, a causa de la estandardización de los itinerarios de visita, no están abiertas a los visitantes en silla de ruedas. La única excepción, de momento, es la visita "Jardines Vaticanos sin barreras" que propone una visita guiada con un itinerario ad hoc, accesible también para los visitantes dificultades de movilidad o en silla de ruedas.